¿Qué es un implante con carga inmediata?

La innovación en la implantología hace que cada vez sea más fácil y menos incómodo reponer nuestros dientes perdidos. Menos dolor, tratamientos mucho más confortables, tiempos de recuperación de la funcionalidad de la boca mucho más rápidos… Un factor que también tiene importancia a la hora de colocarse un implante es el estético. La carga inmediata es la solución para evitar que el paciente muestre una sonrisa incompleta durante los meses que dura el período de osteointegración. Hablamos de ello con el doctor Ignacio Álvarez Figaredo.  

Cuando la implantología comenzó su camino, en los años 80, ponerse un implante estaba reservado a algunos afortunados. El proceso no resultaba ni mucho menos tan llevadero como ahora. Los implantes tenían más posibilidades de no integrarse, y si el paciente no mostraba el suficiente volumen óseo, la intervención no podía realizarse.

Hoy día las cosas han cambiado mucho. La osteointegración se ha favorecido, mediante el perfeccionamiento de los materiales biocompatibles o recurriendo a técnicas complementarias, como la regeneración ósea con plasma enriquecido. Los fracasos son más infrecuentes, debido a los estudios de radiodiagnóstico previos. La consolidación de las técnicas ha favorecido que los tratamientos se vuelvan más económicos. Y la implantología avanzada hace posible que algunos pacientes, que antes lo tenían muy difícil, ahora adquieran nuevas piezas dentales sin problemas.

Hay un factor adicional, del que se habla menos: el estético. Durante el proceso de ostointegración, es decir, los meses que el implante de titanio tarda en fijarse al tejido periodontal, el paciente muestra la ausencia de un diente en su boca. Esto no sucede si el tratamiento implantológico incluye la llamada carga inmediata.

Pero, ¿qué es la carga inmediata? Hablamos de ello con el doctor Ignacio Álvarez Figaredo, de la clínica Rehberger López-Fanjul.

En pocas palabras, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de carga inmediata en un implante?

Cuando hablamos de carga inmediata, nos referimos a la colocación de una prótesis provisional fija en menos de 48 horas, normalmente el mismo día que se realiza la cirugía de colocación de implantes.

¿En qué beneficia al paciente la carga inmediata?

Desde el momento que le colocan el implante, el paciente tendría que esperar de doce a veinte semanas a que le fijen un diente protésico en ese mismo implante. A veces incluso ese tiempo aumenta hasta seis o nueve meses, si contamos desde el momento en que extraemos el diente. Con la implantología con carga inmediata, sin embargo, el paciente puede salir del quirófano con un implante y un diente provisional fijado a él, todo colocado en el mismo día.

¿Por qué no se practicaba antes la implantología con carga inmediata?

Durante muchos años, se han seguido los cánones descritos por el “padre de la implantología”, el doctor Brånemark. Éste aconsejaba la implantación en dos fases. Una primera fase para la colocación de implantes, es decir, los pernos de titanio que se introducirán en el hueso. Y una segunda fase de carga, en la que fijamos los dientes protésicos en esos implantes. Entre la primera y la segunda fase había que esperar de tres a seis meses como condición básica para lograr una buena osteointegración, es decir, un buen anclaje del implante al hueso.

¿Cuánto tiempo lleva practicándose la carga inmediata, entonces?

Hace ya tiempo que se empezó a hablar de carga inmediata, pero ha sido en los últimos años cuando de verdad ha empezado a practicarse de manera regular. Sin embargo, aún a día de hoy, solamente las clínicas mas vanguardistas la realizan.

¿Esto a qué se debe?

A que no es tan sencillo como parece. Se trata de un procedimiento complejo y delicado, donde el trabajo en equipo es fundamental para su correcta ejecución.

¿Cómo es ese proceso?

En una primera visita, la posibilidad de practicar una carga inmediata deberá ser valorada tanto por el cirujano (el especialista que coloca los implantes) como por el prostodoncista (el especialista que coloca la prótesis). Ellos deciden si se cumplen los requisitos necesarios para añadir dientes fijos el mismo día de la cirugía. Después, y según la complejidad del caso, será necesario tomar medidas, registros, impresiones y escáner. Todas estas pruebas serán enviadas al laboratorio dental donde confeccionarán la prótesis provisional. Así, el día del paso por el quirófano, estará todo preparado y, una vez colocados los implantes, se fijará esta prótesis provisional.

Entonces, no todos los pacientes son candidatos a colocarse un implante con carga inmediata.

Así es. Hay muchos factores que afectan como la calidad y cantidad de hueso, bruxismo, tabaquismo, patologías previas y otros que deberán ser valorados por los profesionales previo al tratamiento. De hecho, en algunas ocasiones no se sabe si es posible la colocación de la prótesis inmediata hasta el momento mismo de la cirugía.

¿Cómo debe actuar un paciente que tenga una prótesis provisional de carga inmediata?

Lo primero que tiene que saber es que ese diente no es el definitivo ni es plenamente funcional. Bajo esa prótesis hay un implante en proceso de osteointegración. Es decir, aún no se ha fortalecido lo suficiente su fijación a los tejidos de nuestro cuerpo, por lo que no se le puede someter a una presión excesiva. Por tanto, hay que insistir en que una prótesis de carga inmediata tiene una función meramente estética.

Por tanto, el paciente debe tomar precauciones para no estropearla.

Efectivamente. Pero no son unas medidas muy complicadas. El prostodontista le explicará detenidamente qué puede y qué no puede hacer con su prótesis provisional, hasta que, una vez terminado el proceso de osteointegración, se le sustituya por la prótesis definitiva, que ya será plenamente funcional. En cualquier caso, la ventaja estética de contar con una sonrisa completa, durante todos esos meses, hace que los tratamientos de implantología con carga inmediata merezcan mucho la pena.